La hormiguita viajera
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Hace unos cinco o seis años compré en la Feria del Libro de Buenos Aires un ejemplar de La hormiguita viajera de Constancio C. Vigil. Es la edición de 2007 de la Editorial Atlántida, con ilustraciones de Alejandro Fried y Juli Quinley. Pero dudé bastante antes de pasar por la caja. ¿El motivo? Con solo ver la tapa y sin que fuera necesario abrir el libro para corroborarlo, por el estilo de las imágenes, tenía la certeza de que no era la misma edición que atesoraba en mi memoria. Luego, buscando en Internet, di con las imágenes del libro que leí y releí cuando era niña. Posiblemente perdí ese libro tan querido en alguna mudanza de mi familia. Recuerdo que me lo había regalado para un cumpleaños alguna invitada o invitado, alguno de mis amigos o compañeros de colegio. Recibir y regalar libros para los cumpleaños era mucho más frecuente de lo que es ahora, tan usual como el propósito de armar una biblioteca en la casa con libros comprados a los vendedores a domicilio, que recorrían